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Tabla 1 Síntesis de enfoques de la enseñanza de la literatura (Richards, Li y Tamg 1998: 98) Para Richards (1998: 99 -100) este estudio devela dos problemáticas esencialmente:
El soslayo de la evaluación sistemática por parte del profesor y el alumno Otro aspecto relevante en la práctica educativa de la producción escrita es la ausencia de una cultura que fomente su evaluación. La evaluación de ésta viene a ser una tarea tan compleja como resultado de su mismo desarrollo en el proceso educativo tanto para el alumno de lenguas extranjeras como para el docente. Desde la perspectiva del estudiante el problema puede tener dos puntos de análisis: el primero bajo un contexto tradicional como el desarrollo de una habilidad aislada, sería determinar si alguna vez el alumno ha tomado cursos de redacción y producción de textos de algún estilo y determinar mediante un pequeño examen, si es un productor de textos con cierto nivel de eficiencia—inclusive en lengua materna. El segundo punto de análisis, desde una perspectiva académica integral del uso de la lengua surge de la realidad, en cuanto a la adquisición de una habilidad, y se asume en el hecho que la producción escrita parte de la lectura de textos. Esta propuesta se vincula de manera directa con las estrategias lectoras del alumno, además de su manera de organizar y recuperar la información de lo leído. Se debe apuntar, que en la mayoría de los casos, al carecer el estudiante de una formación adecuada al respecto, utiliza ciertas estrategias de comprensión de lectura al azar, en un proceso individual de análisis sin tomar en cuenta los diferentes tipos de texto (científico, académico o literario) a los cuales se puede enfrentar. Y por último se le presenta también el problema de transferir los contenidos del texto (aspectos lexicales, estilísticos, contextuales y gramaticales) con sus propias palabras y no copiar del texto los argumentos que se evalúan en una actividad de aprendizaje. Para el docente desde un plano general, la evaluación de la producción escrita constituye una práctica cotidiana contradictoria ya que debe conciliar los parámetros institucionales con la evaluación de resultados significativos sobre la base de criterios lingüísticos objetivos. Sin embargo, estos dos valores no siempre van de la mano dentro del proceso de enseñanza aprendizaje, sobre todo en la situación de los diferentes exámenes que se practican periódicamente: departamentales, finales, extraordinarios y de certificación. Cabe señalar que cuando se realiza un examen de lengua extranjera, se evalúa la comprensión escrita en diversas maneras, pero por la falta de tiempo se propone el desarrollo de una respuesta en un pequeño párrafo o por medio de enunciados que responden a una pregunta en los cuales se evalúan solamente la ortografía, la sintaxis y la coherencia. Así cada examen determina sus reglas y por lo general, la producción escrita dentro de los cursos comunicativos se acerca más a la lengua oral que a la construcción de una pequeña composición. No obstante, en el plano del salón de clase se corrobora la dificultad para desarrollar eficientemente las actividades de producción escrita dentro y fuera del aula. Una primera hipótesis sería la falta de instrucción, por parte del docente, en el manejo eficiente de ciertas técnicas de trabajo. Otra hipótesis, puede ser: la carencia de una práctica sistemática en la redacción desde los niveles básicos de su formación inicial (estudios de educación básica) hasta los estudios de educación superior. Y por último, puede ser que el programa de estudios en cuanto al desarrollo de la competencia oral y auditiva sea tan demandante que no exista el tiempo pertinente para desarrollar todas las actividades de producción escrita. Conclusiones A manera de conclusión, es preciso señalar que se debe incluir como una de las metas del entrenamiento de los maestros en formación; una serie de cursos que les permitan desarrollar la habilidad de la producción escrita en su práctica rutinaria, orientándose hacia la reflexión y la crítica constructiva de sus actividades. En otro sentido, se sugiere trabajar en la formación de consensos entre docentes para establecer una metodología de trabajo sistemática para las actividades en el salón de clase. Por lo tanto, es preciso homologar los criterios en cuanto a las creencias ya mencionadas en el texto y crear parámetros objetivos de seguimiento en la evaluación de la producción escrita con estudios correspondientes que enriquezcan el proceso enseñanza-aprendizaje. Finalmente es recomendable la búsqueda continua de textos modelo auténticos en diferentes categorías: texto científico, académico y literario, que sirvan tanto para extraer información valiosa de los mismos como para llevar a buen fin los ejercicios propuestos y que exhiban una organización textual impecable, tema de interés actual y que sean académicamente explotables en una clase de lengua extranjera. Bibliografía
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