diciembre 2018 - mayo 2019
ISSN 2007-5480

Didáctica

Aportes teóricos del Marco Común Europeo de Referencia Europeo y tendencias internacionales en la enseñanza de lenguas

María de Lourdes Aranda Franco *
Roberto Ruiz Cámara **
UAM - Azcapotzalco

Confucio de “Si das a un hombre un pez, le alimentas un día. Por el contrario si enseñas a un hombre a pescar, le alimentas para toda la vida”. Este es el fin último del aprendizaje autorregulado.
(García Gaitero: 2016)

En el transcurso del siglo XXI los estudiantes de nivel universitario se están enfrentando a diversos retos que una nueva era exige y que genera cambios vertiginosos, algunos de estos surgen de los permanentes descubrimientos científicos y los avances de las nuevas tecnologías, cambios que figuran sin precedentes en la historia. Esta situación obliga a las instituciones a generar modelos curriculares diferentes, a construir estrategias de aprendizaje que formen un profesional que haga frente a las demandas de las nuevas generaciones.

Los requerimientos de formación y las exigencias  del neoliberalismo  son cada vez mayores  como mayor ha sido la responsabilidad de ofrecer alternativas de aprender a los estudiantes para enfrentarse a un mundo globalizado. Los requerimientos  son determinados a su vez, por las transformaciones socioeconómicas que se han producido a nivel internacional, especialmente, condicionadas por el desarrollo tecnológico y la inestabilidad económica.

La estrecha vinculación que existe entre educación y trabajo es realmente una constante en los proyectos de formación universitaria y la responsabilidad se sustenta en ofrecer oportunidades de aprendizaje a los estudiantes que los inserten en un mundo globalizado y que ofrezca alternativas de desarrollo económico, social, económico, cultural, a partir del desarrollo de competencias. Dichas oportunidades son incluso a nivel internacional con opciones de intercambios académicos, difusión de la cultura, participación en proyectos multiculturales, en investigaciones científicas, entre otros, que requieren el dominio de lenguas extranjeras. Al hablar de lo que es el desarrollo de competencias García M (2012) señala “como puente esencial entre la formación profesional y las exigencias del contexto social y laboral”.

Las instituciones de nivel superior requieren de propiciar incluso el aprendizaje de lenguas extranjeras bajo un enfoque por competencias y opciones de auto aprendizaje. Es por ello que en este escrito abordaremos el aprendizaje autorregulado como una opción efectiva de aprendizaje de una lengua extranjera.

Acercamiento a la comprensión del aprendizaje autorregulado

Una de las preocupaciones constantes en los investigadores y docentes se dirige a conocer como aprenden los estudiantes, como se apropian de los conocimientos y como docentes diseñar estrategias que surjan de las mismas instituciones de educación superior quienes, a partir de las necesidades de formación profesional y futuro laboral de los estudiantes,   diseñen alternativas pedagógicas que regulen su aprendizaje, considerando sus necesidades cognoscitivas e individuales.

El enfoque por competencias es la orientación que se requiere para fines de una sociedad moderna en instituciones de educación superior, entendiendo por competencias (Perrenoud: 2008), la capacidad de movilizar varios recursos cognitivos para hacer frente a un tipo de situaciones, entre ellas y para fines del presente trabajo, la  autorregulación del aprendizaje que se traducen en estrategias y habilidades para la apropiación y dominio de los propios recursos cognitivos y que sean acordes a las exigencias del mercado laboral y de la sociedad del conocimiento. Las exigencias antes referidas integran incluso el aprendizaje de una lengua extranjera.

Una alternativa pedagógica de aprendizaje en las universidades es la autorregulación  del aprendizaje que es un concepto vigente para los investigadores en materia educativa y psicológica debido a que ofrece en educación superior opciones de intervención en el desarrollo de procesos en los estudiantes para la apropiación, dominio, habilidades y las competencias cognitivas necesarias que favorecerán su aprendizaje y su formación profesional.

La autorregulación es, según la Real Academia Española de la Lengua, la acción y efecto de autorregularse, y autorregularse como regularse por sí mismo Han surgido en las últimas décadas, diferentes términos para referirse al aprendizaje autorregulado tales como: aprendizaje autodirigido, aprendizaje autónomo, aprendizaje independiente y autoaprendizaje. Al hablar de aprendizaje autorregulado nos encontramos que es un constructo teórico relacionado con conceptos como la motivación, la metacognición y la cognición. (Flavel:1987) Es un proceso en el cual los estudiantes activan y sostienen cogniciones, conductas y afectos dirigidos hacia el logro de sus metas (Zimmerman: 2000).

El paradigma pedagógico que sustenta el aprendizaje autorregulado es el centrado en el estudiante, a diferencia de otros paradigmas cuyo proceso gira en torno a la enseñanza y particularmente centrado en el docente. Este último paradigma es el que a mediados del siglo XX imperó en las instituciones educativas en nuestro país, inclusive en las universidades.

Para que un aprendizaje autorregulado se propicie es necesario una  cultura del aprendizaje  (Pozo: 1996), que remite a pensar en nuevas maneras de aprender, de apropiarse de los contenidos de una sociedad moderna, integrando las características de la información donde se posibiliten conocimientos múltiples y  aprendizajes constantes y permanentes.

Vigotsky mencionado por  García M. (2012) al referirse al desarrollo de las funciones psíquicas superiores, considera a la autorregulación, como cualidad y meta del desarrollo psicológico humano y responde a la necesidad de que el hombre tenga más dominio de sí, de tener un control de los fenómenos internos y externos y de poder vivir en sociedad.

Partimos de que el aprendizaje autorregulado es un proceso autogestivo que el estudiante realiza en torno a sus procesos de apropiación de los conocimientos y el desarrollo de habilidades metacognitivas. Tal como lo señala Pintrich, mencionado por García G (2016) “… es un proceso activo y constructivo por el cual el estudiante establece sus propios objetivos de aprendizaje, procurando monitorizar, regular y controlar sus pensamientos, su motivación y su comportamiento de acuerdo a dichos objetivos”. Por otro lado, Manrique (2004) menciona que es un aprendizaje autónomo,  es la facultad que tiene una persona para dirigir, controlar, regular y evaluar su forma de aprender, de forma consciente e intencionada haciendo uso de estrategias de aprendizaje para lograr el objetivo o meta deseada. Esta autonomía debe ser el fin último de la educación, que se expresa en saber aprender a aprender.

Por lo anterior señalado el aprendizaje autorregulado:

Algunas de las características de un estudiante autorregulado son:

  1. Utilizan operaciones de pensamiento tales como síntesis, análisis, abstracción, generalización que le ayudarán en la apropiación del conocimiento, la transformación de su entorno a través de la creatividad y la imaginación. Además  de utilizar estrategias cognitivas como repetición, elaboración y organización para obtención y procesamiento de la información.
  2. Tienen conocimientos sobre como planificar, controlar y dirigir sus habilidades, capacidades y procesos cognitivos hacia el logro de sus metas personales (metacognición).
  3. Son altamente motivados hacia  el desarrollo de las tareas a realizar y presentan sentido de adaptación a las condiciones del medio.
  4.  Son capaces de planificar y controlar el tiempo y el esfuerzo que van a emplear en las tareas y saben crear y estructurar ambientes favorables de aprendizaje, tales como buscar un lugar adecuado para estudiar y la búsqueda de ayuda académica (help-seeking) de los profesores.

La autorregulación del proceso de aprendizaje pretende formar un estudiante autónomo,  con una actitud positiva y autogestiva, que se auto-conozca constantemente, que sea responsable y que sea capaz de auto- controlar su proceso de aprendizaje. Los estudiantes autorregulados aprenden más cosas y mejor que los que esperan ser atendidos pasivamente  a que el profesor les transmita su conocimiento y les dirija sus acciones.

Retomando al Díaz Barriga B (2002), una persona que se considera competente en cuanto a autorregulación y autonomía implica que es competente para afrontar y resolver las demandas situacionales o los problemas planteados.

Para que se realice un aprendizaje autorregulado se requiere ambientes de aprendizaje propicios que generen las instituciones de educación superior bajo condiciones abiertas y facilitadoras, donde el estudiante tenga iniciativas para apropiarse de los conocimientos y favorecer las competencias necesarias. Esto requiere, en primera instancia, conocer las características y necesidades de los estudiantes a través de un diagnóstico con el objeto de identificar el punto de partida del proceso de autorregulación.

El Aprendizaje Autorregulado requiere:

  1. Formular metas propias e identificar mecanismos que lo lleven a lograrlas, con o sin ayuda de otros.
  2. Identificar los recursos humanos y materiales necesarios para alcanzar las metas de aprendizaje establecidas.
  3. Elegir e implementar las estrategias de aprendizaje adecuadas.
  4. Llevar a cabo un proceso de autoevaluación de los resultados del aprendizaje.
  5. El estudiante autorregulado es el que define y decide su camino para aprender a aprender de forma intencional y proactiva (Monereo y Badía, 2001).
  6. El docente ofrece al estudiante herramientas para apropiarse de la información de manera reciente y eficiente. Las estrategias cognitivas constituyen uno de los componentes del aprendizaje autorregulado. García G (2015), retomando a diversos autores señala que las estrategias cognitivas son aquellas que los estudiantes utilizan para ayudar a recordar y acceder a la información con el objetivo de mejorar la capacidad de aprendizaje.

El docente ofrece al estudiante herramientas para apropiarse de la información de manera reciente y eficiente. Las estrategias cognitivas constituyen uno de los componentes del aprendizaje autorregulado. García G (2015), retomando a diversos autores señala que las estrategias cognitivas son aquellas que los estudiantes utilizan para ayudar a recordar y acceder a la información con el objetivo de mejorar la capacidad de aprendizaje.

Estrategias de aprendizaje autorregulado

Lo importante no es aprender pasivamente los contenidos curriculares, sino aprender a conocer, entendido como aquellas formas en que el estudiante aprende y los caminos que recorre para lograrlo. Retomando a J. Delors  (1996) el aprender a conocer refiere a aprender a aprender, lo que remite a aprovechar las posibilidades que ofrece la educación a lo largo de la vida.  No solo de contenidos aprende el hombre, sino de aquellas técnicas, mecanismos, habilidades que facilitará el dominio de la lengua. “…cada persona  aprende a comprender el mundo que la rodea, al menos suficientemente para vivir con dignidad, desarrollar sus capacidades profesionales y comunicarse con los demás. Como fin es el placer de comprender, conocer, de descubrir. Para ello, las estrategias son las vías para lograr conocer el mundo.

Las estrategias desde el punto de vista pedagógico son los andamiajes de que dispone el docente para lograr que el estudiante se apropie del conocimiento a través  del aprendizaje significativo y constructivo. En palabras de Díaz Barriga son: “…. procedimientos que el agente de enseñanza utiliza en forma reflexiva y flexible para promover el logro de aprendizajes significativos en los alumnos. Las estrategias de enseñanza son medios o recursos para prestar la ayuda pedagógica.

Para Derry y Murphy, mencionado por Salaberri (2001) las estrategias de aprendizaje son un conjunto de procedimientos o procesos mentales empleados por un individuo en una situación particular de aprendizaje para facilitar la adquisición de conocimientos. Para Salaberri (2001), las estrategias de aprendizaje son cualquier actividad utilizada por el estudiante durante su proceso de aprendizaje con el fin de optimizarlo.

Los estudiantes ingresan a las instituciones con necesidades diversas: físicas, cognitivas, emocionales, culturales, es decir, son personas con diferencias individuales que los definen como únicos y que requieren estrategias de aprendizaje diferentes. Podríamos decir que habría tantas estrategias de aprendizaje como estudiantes en el aula. Debido a que ello es imposible requerimos que cada uno de los estudiantes tenga actitudes autogestivas a través de estrategias autorreguladas, donde pueda  estructurar sus formas de acceso al conocimiento y a su aprendizaje en una perspectiva más amplia.

Las limitaciones que presentan los estudiantes se relacionan, no con deficiencias cognitivas sino con deficiencias a la hora de planificar, revisar la tarea o no, elegir la estrategia adecuada a emplear.

Zimmerman (2000),  hace referencia  a cuatro niveles de desarrollo de habilidades de autorregulación que son:

  1. Nivel de observación: Donde el estudiante observa un modelo e identifica las características de la habilidad.
  2. Nivel de imitación: Donde el estudiante imita el estilo de un modelo y quien retroalimenta, guía y busca el refuerzo  social durante la práctica.
  3. Nivel de autocontrol: El estudiante desempeña una habilidad en un ambiente estructurado incluso en ausencia del modelo. El uso de la habilidad depende ahora de un modelo internalizado.
  4. Nivel de autorregulación: Este nivel lo alcanza el estudiante cuando puede  adaptar su desempeño a las condiciones individuales y contextuales cambiantes. El estudiante ya no depende del modelo, es capaz de cambiar las tareas estratégicas y hacer los ajustes que se requieran.

Los tres primeros niveles remiten a identificar estrategias que los modelos educativos han realizado o intentan realizar con los estudiantes. El  cuarto nivel de autorregulación requiere, no solo ambientes de aprendizaje propicios sino estrategias que lo formen y que brinden los andamiajes necesarios para el aprendizaje.

Existen tres tipos de estrategias (Jones: 1986, mencionado por Meza 2013): las estrategias de codificación (nombrar, repetir, elaborar, ideas clave de un párrafo), generativas (parafrasear y elaborar el material por medio de metáforas e inferencias) y constructivas (razonamiento, transformación y síntesis). La utilización de estas estrategias en su formación, no solo universitaria, permitirán identificar sus preferencias por apropiarse de los conocimientos y lo que se pretende es que el estudiante sea capaz de ser autocrítico y reflexivo.

Para algunos estudiantes el involucrarlos en estrategias de autorregulación les genera ansiedad, inseguridad y dificultad para insertarse en las dinámicas autoconfrontativas debido a que en su trayectoria educativa se crean mecanismos de dependencia al docente, por ejemplo, al someterse a los establecido; sin embargo, con un ambiente de aprendizaje contenedor, con mecanismos motivacionales reales, recuperando  el sentido a lo que aprenden, se crean dinámicas autorregulatorias donde se aprecian los avances, en general, no solo curriculares.

Según Pintrich (2000) y Manrique (2004) pueden distinguirse tres componentes del aprendizaje autorregulado, especialmente relevantes para el rendimiento académico:

  1. El aprendizaje autorregulado incluye estrategias metacognitivas de los estudiantes, dirigidas a la planificación, control y modificación de su cognición.
  2. El manejo y control, por parte de los estudiantes, del esfuerzo implicado en las tareas académicas constituye otro elemento importante.
  3. Las estrategias cognitivas que los estudiantes utilizan para aprender, recordar y comprender el material.

El docente conoce las diferentes estrategias didácticas y como implementarlas en el aula con el objetivo de cubrir el currículo exigido por las instituciones. Formar estudiantes autogestivos, coactores de sus propios aprendizajes, generadores de nuevos conocimientos,  críticos, reflexivos, no se logra de forma automática, se requiere de estrategias procedimentales donde logre la motivación necesaria y una actitud positiva hacia el aprendizaje y por consecuencia repercute en un buen aprovechamiento. Es de esta manera que estrategias autorregulatorias pueden apoyar a las demandas que la docencia exige en una sociedad actual. Surgen con la determinación de una meta y del  control de la actividad cognitiva por parte del estudiante.

No cabe duda que para aprender una lengua  se necesita escuchar, hablar y conversar, mismas habilidades que tienen que estar presentes en las diversas estrategias autorregulatorias.

Algunas estrategias del aprendizaje autorregulado para el aprendizaje de una lengua.

Para favorecer un aprendizaje autorregulado en estudiantes de lenguas, es importante identificar las estrategias que se utilizarán en los diferentes momentos del proceso educativo, ya sea por sesión, episodio o una secuencia didáctica.

De manera inicial es necesario considerar las siguientes características esenciales, algunas de ellas son:

Algunas de las estrategias sugeridas para el aprendizaje autorregulado y que el estudiante se apropie de una lengua extranjera  son las siguientes:

Algunas herramientas (Jaramillo:2014) al alcance del estudiante y favorecidas por el docente son:

Los estudiantes autorrelulados  se preguntan constantemente al iniciar sus actividades ¿dispongo del tiempo y la energía para realizar esta actividad? ¿Comprendo los contenidos, los temas? ¿Cómo sabré si he logrado aprenderlos y aplicarlos? N.Anderson,N.J.(1999), mencionado por Otaque (2006), señala que se requiere que el estudiante regulado prepare y planee su aprendizaje, seleccione las estrategias a utilizar, monitoree el uso de las estrategias, las evalúe y precise cual ha sido su impacto en el aprendizaje.

En una sociedad donde las nuevas tecnologías se convierten en recursos indispensables para favorecer estrategias de autorregulación se requiere el uso de herramientas virtuales que las optimicen, algunas de ellas son: Blogs virtuales, Wikis, multimedia, entre otros recursos.

Dichas herramientas se asocian con las estrategias pedagógicas implementadas para el logro de metas establecidas por el estudiante en función del currículo, las motivaciones personales, profesionales y laborales, de los recursos institucionales a  los que se tiene acceso la institución.

Conclusiones

A manera de conclusión:

Bibliografía

Anderson, N. J. (1999) Exploring second language reading: Issues and strategies. Boston: Heinle & Heinle.

Badia, A. y Monereo, C. (2004). La construcción de conocimiento profesional docente. Análisis de un curso de formación sobre enseñanza estratégica.  Universidad de Barcelona. Anuario de Psicología, 35 (1), 47-70.

Delors, J. (1996.): Los cuatro pilares de la educación” en La educación encierra un tesoro. Informe a la UNESCO de la Comisión internacional sobre la educación para el siglo XXI, Madrid, España: Santillana/UNESCO. pp. 91-103.

Díaz Barriga F. y Hernández G.  (2002) Estrategias docentes para un aprendizaje significativo.  Una interpretación constructivista. 2ª ed  Mc Grau Hill. Mèxico.

Flavell, J..H.  (19879 Metaconnition and cognitive monitoring. A new área of cognitive development inquire. En : America, Psychologies.

García G.Ó. (2016) El aprendizaje autorregulado en la enseñanza del inglés para la mejora de la producción escrita en el tercer ciclo de la educación primaria en la enseñanza bilingüe en la Comunidad de Madrid  . Tesis doctoral. Universidad Complutense.

Garcìa M. I.  (2012) Estrategias para el desarrollo de la autorregulación del aprendizaje en estudiantes de enseñanza superior . Tesis Doctoral Centro de investigación y Docencia en Humanidades del Estado de Morelos.

Jaramillo N. L.M. (2014). La metacognición y su aplicación en las herramientas virtuales desde la pràctica docente. Redyalic. Universidad Politècnica Salesiana. Sophia. Colecciòn de filosofía educativa No.16 Ecuador.

Manrique Villavicencio, L. (2004) El aprendizaje autónomo en la educación a distancia LatinEduca2004.com Primer Congreso Virtual Latinoamericano de Educación a Distancia - Perú
Martín- Cuadrado, A (2011) Competencias del estudiante autorregulado y los estilos de aprendizaje. Revista Estilos de Aprendizaje, no8, Vol 4, octubre de  uned. España.

Meza A. (2013) Estrategias de aprendizaje. Definiciones, clasificación e instrumentos de medición.  Universidad de San Marcos, Perú- http//dxdoi.org

Otake C. (2006)Las experiencias metacognitivas , sus estrategias y su relación con las plataformas educativas.En: Memorias del 6º. Encuentro Nacional e Internacional de Centros de Autoacceso de Lenguas. La autonomía del aprendiente: escenarios posibles México: CELE, UNAM.

Perrenoud  P.(2007). Diez nuevas competencias para enseñar. invitación al viaje, Graõ, Colofón, México.

Pintrich, P.R. The role of goal. Orientations in self-regulated learnig. San Diego ,USA
Pozo J.I. (1996) Aprendices y Maestros. La nueva cultura del aprendizaje .Alianza Editorial Madrid.

Real Academia Española de la Lengua.(2014)  Madrid, Espasa.

Salaberri R. M.  (2001) Aproximación a la enseñanza de estrategias cognitivas. Concepto y ejemplificaciones . Revista de Educación Universitaria . Universidad de Almeria.

Torrano M. F. (2004) El aprendizaje autorregulado: presente y futuro de la investigación  En Redyalic. Electronic Journal of Research in Educational Psychology, vol. 2, núm. 1, abril, 2004, España.

Vigosky , L.S (1964) Pensamiento y Lenguaje, Lautaro.

Zimmerman Barry j.(2002),  Becoming a self regulated learner. En Contemporánea Educational Psicology.

 


* María de Lourdes Aranda Franco: Licenciada en letras Hispánicas y Maestra en desarrollo del potencial humano por la Universidad de Guanajuato. Profesora investigadora de tiempo completo de la UAM-A.

** Roberto Ruíz Cámara: Licenciado en Letras Francesas. Maestría en Educación por la UVM. Profesor Investigador de tiempo completo UAM-A.

 

Reserva de Dererchos-INDAUTOR: 04-2010-060210103400-203
ISSN 2007-5480