Didáctica
La importancia del juego en adultos: herramienta para la adquisición de la competencia lingüística de una lengua extranjera
Ma. De los Angeles Mendoza *
UNICACH
Resumen El ser humano aprende mediante la experimentación, un adulto a diferencia de un niño es consciente de sus conocimientos y deficiencias, lo que le proporciona un sentimiento de control. Por lo tanto, cuando se diseña un plan de clase para adultos es importante considerar sus necesidades y expectativas, ya que no se puede educar al adulto usando las mismas técnicas utilizadas con niños. Asimismo, es necesario reconocer que los adultos poseen experiencias que sirven de partida para incorporar nuevos conocimientos, así como estilos cognitivos y estrategias de aprendizaje que deben ser tenidas en cuenta a la hora de abordar la planeación y desarrollo de una clase. Por su parte, el enfoque comunicativo proporciona una perspectiva del lenguaje más amplio, el objetivo fundamental no es sólo aprender gramática, sino que el alumno pueda comunicarse mejor con el idioma, es decir ser capaz de usar el lenguaje adecuadamente en las diversas situaciones que se le presenten. Por lo tanto las clases son más activas y participativas, los alumnos practican los aspectos orales y escritos con ejercicios más reales y se consideran las necesidades y motivaciones de los alumnos, lo que permite aplicar actividades como el juego en situaciones cotidianas reforzando los conocimientos teóricos. |
Palabras clave Aprendizaje, Competencia, Lingüística. |
Enfoque comunicativo y competencia lingüística
Conforme al enfoque comunicativo el aprendizaje de lenguas extranjeras debe ir dirigido a la consecución de competencias comunicativas y a la adquisición de destrezas que les permitan comunicarse en situaciones cotidianas, surge en el siglo XX a principios de los setenta y se propone lograr una comunicación real y efectiva. Es según Germain cualquier enfoque preocupado por la adquisición de una competencia comunicativa sugiriendo medios apropiados y efectivos para la consecución de dicho objetivo (Germain, 1992:55)
El Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCERL), establece que las competencias comunicativas son las que posibilitan a una persona a actuar utilizando específicamente medios lingüísticos y comprende varios componentes, tales como: el lingüístico (incluyen conocimientos y destrezas léxicas, fonológicas y sintáctica, alcance y calidad de los conocimientos, organización cognitiva y forma de almacenar los conocimiento); el sociolingüístico (se refiere a las condiciones socio culturales del uso de la lengua a través de las normas de cortesía, relaciones entre generaciones y sexos, entre otros; y pragmático que es el uso funcional de los recursos lingüísticos a través de la producción hablada, incluye el discurso, cohesión y coherencia.
Considerando estos elementos y las habilidades que el alumno debe obtener, para hablar, escribir, escuchar o leer el alumno tiene que llevar a cabo una secuencia de acciones realizadas con destreza (MCERL, 2002:88, 89), por ejemplo:
Asimismo, El MCERL determina que la competencia lingüística incluye el aspecto léxico, gramatical, la semántica, fonológica, ortográfica y ortoépica.
Aprendizaje de un idioma en edad adulta
A cualquier edad, los estudiantes deben de tener un cambio de actividades de aprendizaje en forma constante, para mejorar sus habilidades y conocimiento, lo que los motivará y ayudara a construir la autoconfianza en su aprendizaje. Duffy y Jonassen establecen que en primer término se deben presentar las ideas básicas de un tema y después revisar y construirlas o modificarlas constantemente, es decir debe existir flexibilidad para incluir los elementos que observa y recibe como retroalimentación de los alumnos; así la experiencia de aprendizaje se convierte en algo compartido, las emociones y el contexto de la vida de cada individuo se consideran como parte integral del proceso de aprendizaje.
Otros autores establecen que la adquisición de la primera lengua se realiza de manera natural y espontánea, mientras que el aprendizaje de una segunda, implica la estructuración de un método para enseñar el código, es decir, el idioma y una metodología que se adecue a los participantes del proceso.
Newmark, afirma que la atención sistemática a las formas gramaticales no es necesario para el aprendizaje efectivo de un idioma, y que el único método para la enseñanza de una segunda lengua, es reproducir la forma en que se realizó el aprendizaje de la primera, ya que al recurrir al aprendizaje de reglas gramaticales inhibe el desarrollo de las habilidades lingüísticas, por que el estudiante al ser expuesto en forma consciente y deliberada se transforma en un hablante lento e incapaz de expresarse debido a que piensa mucho antes de hablar.
Los niños, aprenden palabras al inicio de su aprendizaje, en una primera o segunda lengua, pasando después a frases cortas hasta llegar a construir oraciones más complejas. Los adultos, por la necesidad de comunicación hacen el proceso de aprendizaje más dinámico, ya que se espera que el adulto pueda comunicarse desde un principio, que pueda presentarse, referirse a su trabajo, entablar un mínimo intercambio verbal en una situación social simple, y manejarse en situaciones reales tales como en un aeropuerto, un restaurante o tienda.
Por otra parte, a los niños no se los corrige cuando cometen un error. El instructor (que puede ser el padre, madre, maestro o cualquier adulto) recurre al "eco" o paráfrasis, repitiendo en forma correcta lo dicho por el niño. A diferencia de los niños, el adulto espera ser corregido, quiere conocer conscientemente la forma correcta de expresión que necesita y por lo general se dan cuenta cuando se expresan en forma incorrecta o imprecisa. Esta percepción les provoca incomodidad, por lo que se hace necesario recurrir y reciclar elementos gramaticales y vocabulario una y otra vez, a través de ejercitación diferente, con materiales impresos, de audio o multimedia, juegos, que muestren una variedad visual y auditiva variada en términos de contexto y diseño. (Mendoza, 2008: 12)
Algunas condicionantes del aprendizaje de adultos que se encuentra con mayor frecuencia son:
Por otra parte, es importante considerar los siguientes aspectos.
El juego
Para el niño el juego sirve como un medio natural de aprendizaje y como medio de su desarrollo físico, psicológico, afectivo, cognoscitivo y social. A través del juego se desarrolla y fortalece la experiencia y se genera el aprendizaje significativo, en la práctica docente se propician valores tales como tolerancia, respeto, solidaridad, cooperación, entre otros, y sobre todo sirve como enlace a contenidos actitudinales, conceptuales y procedimentales, estimula la creatividad y cambian la rutina del proceso enseñanza aprendizaje. El juego es una actividad cotidiana en la vida del niño, la practica en el contexto familiar y en el espacio educativo, ya sea de forma individual o en equipo, sin embargo una vez que crece y se convierte en adulto, el juego deja de formar parte de su vida y se realiza en forma ocasional y con fines eminentemente recreativos.
a) Teorías del juego
Uno de los representantes de la teoría clásica del juego, Deval establece que el juego es un ejercicio preparatorio o preejercicio para el desarrollo de funciones necesarias para los adultos y que el niño ensaya sin la responsabilidad de hacerlas de una manera completa (Deval, 1994: 14). Esta teoría señala que en la infancia el individuo inicia a conocer el mundo a través de los sentidos y se realiza por imitación. En la adolescencia y etapa adulta en el juego no busca el reconocimiento de los demás sino para demostrarse sus capacidades.
Conforme a la teoría cognoscitiva, Piaget, uno de sus principales representantes, considera que el juego es un elemento importante para desarrollar la inteligencia, no hace conjeturas y es una actividad que no es frustrante.
La teoría sociológica de Haller considera que el juego puede desarrollarse desde tres puntos de vista, como es el de pura fantasía que ayuda a desarrollar la inventiva y creatividad a través de situaciones imaginarias; el mimético donde se imitan gestos, habla y ademanes de personas; y los regulados que tienen como fin establecer actitudes y actividades específicas.
b) Uso del juego
Los juegos pueden ayudar a crear el contexto en el que una lengua se usa y tiene significado. El estudiante desea entender lo que otros están diciendo o han escrito, quieren hablar, escribir o expresar sus puntos de vista y proporcionar información.
Si los estudiantes se divierten, están intrigados o sorprendidos durante el proceso de aprendizaje, el contenido y significado de una tarea se vuelve claro para ellos. De este modo, el significado del idioma que escuchan, leen, hablan y escriben será más vívido y entonces se recordará mejor.
El aprendizaje de un idioma puede ser difícil y frustrante para algunos adultos, se requiere de un esfuerzo constante para entender, producir y manejar las estructuras y vocabulario. Los juegos pueden resultar invaluables para que los estudiantes puedan practicar el lenguaje de una forma diferente, ya que por lo general suelen ser divertidos e interesantes, además incrementan la cooperación en los grupos.
El uso de la lengua para fines lúdicos desempeña un papel importante en el aprendizaje y desarrollo del idioma, algunos ejemplos pueden ser: juegos de lengua de carácter social orales, escritos, audiovisuales, de tablero, cartas, mímica, entre otros; actividades individuales como pasatiempos, juegos de televisión y radio; juegos de palabras como anuncios publicitarios y titulares de periódicos. (MERCL, 2002: 59)
Asimismo, es importante que los juegos no deban considerarse sólo como actividades para completar un plan de clase o cuando el maestro no tiene otra cosa que hacer, sino que tienen un gran valor educacional cuando los estudiantes utilizan el lenguaje sin tener que pensar si es la forma correcta o no.
Los juegos se pueden clasificar en (Mendoza, 2008: 31,32):
c) Ventajas de utilizar juegos en el salón de clases
d) Desventajas del juego
La mayoría de los aspectos enumerados como desventajas pueden ser minimizados, cuando se exponen los objetivos del juego, se presentan reglas claras y se motiva a los alumnos para su participación activa.
Ejemplo de un juego:
Nombre: Intercambio de sombreros
Objetivo:
Resultados esperados:
Tiempo: 10 - 15 minutos
Material: Sombreros
Procedimiento:
Conclusiones
A lo largo de la historia el juego ha sido valorado como aspecto fundamental en la formación del individuo. En el aprendizaje de un idioma como lengua extranjera el juego es una herramienta excelente, ya que el estudiante puede practicar el vocabulario, estructuras lingüísticas, entre otros aspectos.
Asimismo, el juego se considera como un elemento motivador que fomenta la creatividad y espontaneidad. De este modo, los juegos ayudan a que el idioma que estudian adquiera significado cuando lo escuchan, leen, hablan y escriben, es una forma divertida e interactiva que refuerza el conocimiento.
Por la facilidad de introducirlo en cualquier momento del proceso educativo, puede desempeñar diferentes funciones, desde la presentación de un nuevo contenido o el complemento a una actividad, hasta ser el elemento de repaso de estructuras explicadas anteriormente en el aula.
Bibliografía
BATLLORI, José, (1996), Como educar jugando, México, Minos.
DEVAL, Juan, (1994), El juego en el desarrollo humano, en El Juego Antología, México, UPN.
ELLIS, R., (1996), The study of second language acquisition. USA, Oxford University Press.
GARDNER, H., (1998), La nueva ciencia de la mente. España, Historia de la revolución cognitiva, Paidós.
GERMAIN, Claude, (1992), Enfoque comunicativo, como juegan o enseñan, Canada, Universidad de Montreal.
Marco Común Europeo de Referencia para las lenguas: Aprendizaje, enseñanza, evaluación (2002), Instituto Cervantes, sitio: http://cvc.cervantes.es/obref/marco, consultado el 20 de diciembre del 2013.
MENDOZA, María (2008), El juego como estrategia de aprendizaje en adultos, México, UNICACH.
* Ma. De Los Angeles Mendoza González: Docente del Centro de Lenguas de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH). Doctora en Derecho Público, Maestra en Administración, Contador Público, Especialista en Educación alternativa. Imparte clases a nivel Doctorado, Maestría y Licenciatura en diversas instituciones públicas y privadas. En UNICACH labora desde hace 12 años.